Victoria con sabor a grande...

Con gol de Rodrigo Díaz, Almirante Brown gano uno de esos partidos “especiales”, basándose en la garra doblego a un Rosario Central en un emotivo encuentro de ida y vueltas. Destacada labor de Mandarino, jugador que demuestra constante sacrificio y oficio para adaptarse al juego.

Noche de gala en el Fragata Sarmiento, la visita de uno de los grandes del futbol argentino, originaba un gustito especial ante un marco de público que no defraudo y concurrió masivamente. Dentro del rectángulo no hubo excepciones, y el juego, mejor dicho la garra y la entrega de ambos conjuntos corono una noche que se completo con la victoria aurinegra.
El equipo de “mostaza” Merlo, debe de ser candidato por naturaleza, aunque la categoría le cuesta y la adaptación a la misma lleva su tiempo, sin embargo se presento en la noche matancera decidido a comenzar su levantada definitiva, y vaya que lo dejo en claro cuando aun no se cumplía el minuto de juego y Paglialunga estrellaba un cabezazo en el travesaño, seria el presagio de lo que tenia en mente el canalla, llevarse por delante al mirasol. Fueron los mejores momentos de la visita, Moya intentando quebrar la última línea local para asistir a sus habilidosos delanteros, González desde unos metros atrás presionando la mitad de cancha, para de esta forma adueñarse del juego. Pero la presión auriazul seso cuando la línea media local se acomodo, la tarea de Veron que mediante todo su sacrificio logro aplacar a los volantes adversarios, fue momento local y mediante la tarea de Rodrigo Díaz comenzó a generar juego en ataque, el control del partido paso a manos aurinegras y los sobresaltos sobre la valla de Broun comenzaron a hacerse presente. Mandarino se habitúo rápidamente a su posición y Bazan Vera ofrecía su habitual peligro, y Central dejo durante 30 minutos de ser el de los primeros 15.
La segunda mitad presentaría a un Almirante Brown mas agresivo y tal fue así que a los 8 Rodrigo Díaz le daría la ventaja en el tanteador al conjunto local. De allí en mas fue el propio goleador quien se encargo de romper líneas y atravesarlas, proveyendo de juego en ataque, mientras Central comenzaba a largar una infinidad de centros sobre la vaya de Monasterio, sistema que se mostró permanente e hirió varias veces al aurinegro, aunque nunca logro consolidar en la red.
El desesperado agobio canalla llegaba sobre el final, Veron comete una infracción cerca de su área teniendo amarilla, la expulsión era un echo pero Furchi lo perdono; ante esta situación Giunta manda a García en su lugar, la idea de retener el balón en mitad de campo, sumado al seguido ingreso de Maraschi, para cuando Almirante se paro de contra para golpear la vaya adversaria. Mientras los peligrosos centros rosarinos seguían cayendo, la sólida defensa aurinegra los seguía sacando y el final del partido fue un desahogo maravilloso para los 16000 aficionados locales.
Gano Almirante Brown, y aunque Central mostró lo suyo, fue justo, porque supo aguantar los embates, porque tubo en Rodrigo Díaz penetración y desnivel, y por la gran tarea de Mandarino en el frente de ataque. Fue derrota canalla, porque con las ganas y todo el esfuerzo hay veces que no alcanza.



Por Jorge Huar


BONUS TRACK: Para el arbitraje de Furchi, mal para ambos lados, dejo pasar varias infracciones y no amonesto cuando debió en algunas ocasiones. Debió expulsar a Veron y decidió hacer vista gorda. Para culminarla, adiciono desmedidamente 4 minutos y luego 1 mas.